Antes de dejar Santa Teresita, reponemos agua potable
en estos lugares que hay en varios puntos
del Municipio de La Costa.
El agua de red, es provista por Aguas Bonaerenses.
Nos instalamos en Aguas Verdes, un pequeño,
tranquilo y acogedor balneario
entre San Clemente y San Bernardo.
Las amplias palyas, cargadas de almejas,
son un lugar ideal para el descanso y la pesca.
Entre Aguas Verdes y La Lucila del Mar, caminando por la playa,
es posible ver esta antigua y fastuosa construcción.
La familia Duhau, poseían una enorme estancia, la San Bernardo.
Esta construcción pegada a la playa en
medio de un campó de golf, era utilizada para el descanso.
El diseño está inspirado en el Castillo de Marais,
en la Región de Ihe en Francia.
La estancia se fraccionó y a partir de ello,
y de una importante forestación,
se fundaron los balnearios
de Aguas Verdes y La Lucila del Mar.
Caminando por la playa, llegamos a la vecina Lucila del Mar.
Este viejo muelle de madera,
permite la pesca con caña o medio mundo.
Un fuerte sudestada, nos despide de Aguas Verdes.